viernes, 15 de noviembre de 2013

Marea de sentimientos.

Soy cómo el mar, cuantas veces lo digo, pero es que es cierto. Casi siempre inquieto, un ir y venir, movimientos continuos... pero dentro de los límites. Así está el mar, siempre marcando la playa, casi cubierta o inmenso arenal, pero dejando ver ese lugar. Llega un día, en el que el mar se embravece, se revoluciona, se altera y cubre el arenal, llega a la carretera y olvida delimitar. Ese día explotas, la gente piensa que la culpa es del mar, que si ha invadido la tierra, se ha salido de sus márgenes... pues no. ¿Cuántas veces la tierra le ha comido lugar al mar?
Llevaba días en los que yo no me notaba yo misma, no estaba cómo habitualmente soy yo y cada vez que me daba cuenta, me ponía peor conmigo misma. Notaba mi humor, intentaba disimularlo, creo que lo bordé, pero llega un día en el que necesito contarlo, exploto y tengo que confesar que no he tenido mis mejores días. Quizá sea lo que me ha ocurrido en otra ocasión, la carga durante la enfermedad se hace llevadera, pues miles de preocupaciones ocupan tu cabeza como para pensar en lo saturada que puedes estar mentalmente, en cambio, cuando tu tratamiento termina, tu cabeza se libera de tratamiento, y todo lo que en su momento no pasaste, se junta.
No me gusta nada esta situación, estos días, no sé como afrontar mi Vida sin ser yo misma, lo reconozco, de hecho no sé hacerlo. Ahora, unos días después de explotar, de pensar en que hasta aquí llegaron esos días en los que Mirian no era la Mirian de siempre, vuelvo a actualizar y a contaros que estas cosas pasan,  que estos altibajos los tiene una persona del día a día por razones probablemente más insignificantes que esta (a cada uno le cuesta lo suyo), que si el peinado no me ha salido como quería o que si el mando de la tele no tiene pilas... yo, me he dicho a mí misma que tengo el derecho de ponerme un poco de bajón, pero poco muy poco, poquísimo, de hecho, muuuuuuuuy poquitito.



Siento no haber actualizado estos días, pero no sabía que contaros, estando de bajón no me apetecía hablaros del bajón porque me enbajonaba y claro, quién sería el buen desenbajonador que me desenbajonaría, pues el buen desenbajonador que me desenbajonó fue un buen desenbajonador... Exacto, me he liado! Jajajajajajaja (me estoy riendo yo sola).
Os mando un beso grande para todos vosotros y gracias por hacer que a pesar de mi ausencia Bloguera de esta semana, sigáis visitándome por aquí para saber de mí. Un beso a todos y todas, gracias de nuevo jeje, muaac ;).


Para comentar, sólo tendréis que seleccionar la manera en la que queréis salir como autores, ya sea anónimo, con vuestro nombre, la cuenta de Google,etc.
Gracias por vuestros comentarios, un placer leeros, gracias.

Información:
·Twitter:  @quedamuchavida    (A la derecha, en la columna, tenéis la forma de seguirme directamente)
·Este blog ya posee una página en Facebook, el enlace es: 

















No hay medicina que cure lo que no cura la felicidad :)

9 comentarios:

  1. Pero bueno Mirian, solo faltaba que no te puedas permitir de vez en cuando tener esos momentos de bajón, es lo más normal del mundo. Pero ya está, a partir de ahora arriba ese ánimo y a sonreír que como ya sabemos todos, se te da genial. Un beso grande.

    ResponderEliminar
  2. Ole, olé! que bien sabes contarlo. Déjate mimar y ahora a disfrutar del subidón, pues siempre llega después de lo contrario. Un besiño desde mi ventana.

    ResponderEliminar
  3. Como buena productora que eres y manager de aprendiz de mago sabes que " aquellos que creen en la mágia, están destinados a encontrarla".

    TQ + muchisíiiiiiiiiiiiiiiisimo

    ResponderEliminar
  4. Pues tienes todo el derecho del mundo, Mirian, a tener un bajón, a cabrearte con el mundo y a permitirte desconectar, faltaría más! cuando se pasa una época en tensión, todo nuestro cuerpo está alerta y nos encontramos más eufóricos de lo normal, porque nuestra mente nos pide concentrar toda nuestra energía en esa lucha. Cuando deberíamos de relajarnos porque las cosas van mejor....es cuando nos pasa factura toda la tensión acumulada, que aunque intentemos disimularla...es mucha. Pero sé que tú eres de las que subes como la espuma!! ¿será la magia? besos. Conchi.

    ResponderEliminar
  5. Lo del bajon..creo que nos pasa a todos. A mi me pasa y muchas veces no se porque.Me pregunto a mi misma:pero que te falta Loli?la respuesta casi siempre es nada.Pero aun asi no logro venirme arriba hasta que pasan unos dias..y nunca pase lo que tu pasaste,por eso no te sientas mal por el bajon,simplemente dejalo pasar..Es totalmente normal y comprensible.

    ResponderEliminar
  6. Lo del bajon..creo que nos pasa a todos. A mi me pasa y muchas veces no se porque.Me pregunto a mi misma:pero que te falta Loli?la respuesta casi siempre es nada.Pero aun asi no logro venirme arriba hasta que pasan unos dias..y nunca pase lo que tu pasaste,por eso no te sientas mal por el bajon,simplemente dejalo pasar..Es totalmente normal y comprensible.

    ResponderEliminar
  7. Lo del bajon..creo que nos pasa a todos. A mi me pasa y muchas veces no se porque.Me pregunto a mi misma:pero que te falta Loli?la respuesta casi siempre es nada.Pero aun asi no logro venirme arriba hasta que pasan unos dias..y nunca pase lo que tu pasaste,por eso no te sientas mal por el bajon,simplemente dejalo pasar..Es totalmente normal y comprensible.

    ResponderEliminar
  8. Con la fuerza que tu tiene "los bajones" no tienen nada que hacer...
    Abrazos.

    ResponderEliminar
  9. Hay días grises....... y otros azules, y verdes y amarillos... A mí me gustan los encarnados! Y yo, que algo voy aprendiendo de telas y estampados, también he comprobado que los hay de cuadros, de lunares, de motivos geométricos, de rayas... ¡y de flores!
    Pues eso, Miri: que después de esos días grises, espero que recuperes totalmente el ánimo y vuelvas a tener muuuuuuuuuuchos días llenos de flores y con todos los colores del arco iris, como nos tienes acostumbrados!!!
    ¡Aquí te quiere hasta el perro, sabías?
    Muchos abrazos y lametones!!!
    Merce (y el Pelma) (y el Fusco)

    ResponderEliminar